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Buena chanza, mejor pitanza

24 Horas (Algo se cocía)

Las 24 de Horas de Balonmano son, cómo su nombre dice, 24 horas ininterrumpidas de juego, pero son muchas más horas de trabajo. Se trabaja para organizarlas, realizarlas y terminarlas. Desde la búsqueda de patrocinadores a la realización de una mesa de juego, todas las tareas se realizan de forma voluntaria y desde luego sacrificada.

El día en que se realizan, toda la Escuela se vuelca en su organización repartiéndose las tareas de llevar el bar (la más agradecida en mi opinión), la cocina, hacer mesas, dar el refresco a los peques, dar los obsequios y gestionar los vestuarios (la labor más ingrata). También es meritoria la labor de los árbitros que cada año tienen más difícil cubrir el evento.

En mis año de colaborador activo he estado en todas esas labores excepto en una. Nunca estuve en la cocina. Al menos en este vídeo se intuye lo que se cocía.

[VIDEO: 24 horas de balonmano 1983]

3 comentarios

Ex-Presi -

Refrendo tus palabras Pedrol, un orgullo participar en la organización de cada una de las ediciones de "nuestras" 24 Horas de Balonmano.
Los recuerdos son muchos, y los míos, en cuanto a trabajo durante las mismas, siempre han estado vinculados con los vestuarios. Los primeros años con el Papi y la Mami como responsables del servicio y posteriormente como "jefe".
Perfectas las imágenes. Ya estoy deseando ver la próxima entrega.

Pedrol -

Las 24 horas han sido, son y serán un orgullo para todos los que las hemos conocido y cocinado. A fuego lento desde que terminan hasta que empiezan al año siguiente. Recuerdas ese fin de semana como el mejor de las fiestas del Pilar, estoy convencido. La climatología a veces no ha acompañado como debería, pero bueno. Muchos recuerdos. Una idea brillante de los ´70. Sobre mi colaboración en las 24 recuerdo que estuve en todos los destinos. Lo que más me gustaba era ver los partidos de los mayores.

Olga -

Ay!! qué duras las 24 horas! y ya no nos queda nada para las de este año.
El video nos muestra la cara amable de la cocina, ¿verdad Fernando?
Qué jovenes están todos!!